El jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Jorge Macri, anunció la reactivación de una práctica política históricamente habitual en el PRO: reuniones directas con vecinos en distintos barrios porteños. El objetivo declarado es recuperar la cercanía con los ciudadanos, reconstruir el capital político dañado tras los malos resultados electorales de mayo y reposicionar su gestión a nivel territorial. 

Este relanzamiento del contacto vecinal incluye operativos barriales y comunales, participación de los ministros y presencia de toda la estructura gubernamental local en sedes comunales, clubes y asociaciones civiles. Según fuentes del entorno del macrismo, Macri ya habría realizado unas 40 instancias de este tipo, mientras que otros funcionarios como la vicejefa, Clara Muzzio, y el jefe de Gabinete, Gabriel Sánchez Zinny, también participaron activamente. 

En paralelo, la estrategia viene acompañada de un refuerzo temático en seguridad, orden urbano y servicios, con un discurso que combina firmeza institucional con gestos de proximidad. Desde el equipo de Gobierno señalan que la nueva figura del subsecretario de Gobierno y Vínculo Ciudadano, Ezequiel Sabor, fue clave para articular esta línea de acción, coordinando los operativos móviles y atendiendo reclamos locales.