El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, reaccionó a los cacerolazos de ayer por la noche en distintos puntos de la Ciudad tras el discurso por cadena nacional del presidente Javier Milei, en el que anunció 30 principales medidas. El mandatario porteño consideró que “fue una sorpresa”, y es por esa razón que no se pudo organizar un operativo de seguridad. “No hubo aviso”, sostuvo.

El funcionario insistió este jueves que el cacerolazo que reunió a miles de personas “fue una sorpresa”, pero estimó que “es un horario donde no se afecta a tanta gente” y que no hubo un aviso previo, en relación a la espontaneidad de las manifestaciones, por lo que “es más difícil organizar un operativo”.

Los cacerolazos comenzaron alrededor de las 21 del miércoles, cuando el Presidente anunciaba un megadecreto de desregulación económica y derogación de más de 300 leyes a través de cadena nacional. “Fue distinto a una marcha que se programó muchos días antes”, agregó, diferenciando entre la marcha de anoche y la movilización de organizaciones de izquierda del miércoles 20 de diciembre.